Una de las grandes preocupaciones llegado el invierno es el del aumento del apetito que pone en jaque nuestro peso promedio. Esto no es del todo cierto y les voy a explicar porque.
Cuando aparecen las épocas de frío, el organismo se ve obligado a aumentar la temperatura para igualarla a la que teníamos los días de calor. Por ejemplo, el cuerpo busca siempre mantenerse a 37 grados haga calor o frío en el ambiente.
La manera que tiene el organismo para aumentar su temperatura es aumentando la transformación de los alimentos y la grasa acumulada en calor. Es por este tema, que el organismo necesita un constante suministro de alimentos para mantener su temperatura constante.
Es por eso que en invierno, o en épocas de frío aumenta el apetito, pero quedate tranquilo que como expliqué previamente, es una cuestión sumamente natural y no se va a ver reflejado en el peso.
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